Dominando las inspecciones de colmenas - Parte 2
Segundo de una serie múltiple
Dependiendo de dónde se encuentre en su aventura apícola, es posible que tenga puntos de vista completamente opuestos de otros apicultores con respecto a las inspecciones de las colmenas.
Los apicultores nuevos inspeccionan las colmenas para aprender Y para manejarlas a medida que aprenden.
Los apicultores experimentados suelen inspeccionar las colmenas por cuatro razones:
- Verificar que la reina esté poniendo
- Busque tiendas de miel
- Busque señales de enjambre (ajustes de espacio)
- Monitorizar plagas y enfermedades de la cría
Creo que es importante experimentar tanto el aprendizaje como el manejo de las colmenas, respetando la dinámica de una colonia de abejas. Lo digo porque "darles a las abejas su espacio" (en sentido figurado y literal) es fundamental en la apicultura. Como mencioné el mes pasado, deberías tener una razón para entrar en tu colmena... aunque sea para aprender.
En el segmento de este mes, profundizaremos en el núcleo de la colmena: ¡el nido de cría! Comprender cómo debe estar distribuida una colmena y qué se supone que se debe ver es el primer paso para identificar un problema, si lo hay.
Es bastante sencillo. Las abejas construyen sus nidos con mucha precisión. Colocan cada componente en un orden específico con mínima variación. ¡Apréndanlo! ¡Lo usarán en un examen más adelante!
A continuación se muestra un diagrama de un nido de cría típico. Al observarlo, ¿qué observa?
- El nido de cría (sin importar la temporada o lo grande que sea) “generalmente” está en el centro
- Recursos (Miel, néctar y polen) a izquierda y derecha del centro (Siempre)
Considere esto como una hoja de ruta para una colmena. ¿A qué me refería con "probar después"?
Aquí está: ya sea que esté inspeccionando una colmena, haciendo una división o manipulando cuadros, estas reglas básicas se aplican siempre.
– Cría en el centro y recursos hacia el exterior.
Ya te lo dije, ¡simple!
Al inspeccionar nuestra colmena, la tarea principal es identificar tanto los aspectos positivos como los negativos. Para ello, debemos ir un paso más allá y comprender no solo lo que aparece en los cuadros, sino también, y de igual importancia, el porqué.
Para empezar, consideremos la forma del nido. Como vimos en el mapa de la colmena, nuestro nido está en el centro. No solo está en el centro, sino que es alargado como un balón de fútbol, ¡a veces incluso como un balón de baloncesto! En otras palabras, una caja de cría de doble profundidad a finales de la primavera podría ocupar fácilmente gran parte del nido, asemejándose a una pelota de baloncesto alargada.
Por otro lado, ahora mismo estamos en declive poblacional. El baloncesto probablemente se ha convertido en fútbol americano, camino del sóftbol. Sí, muchas metáforas deportivas... ¡Qué puedo decir! ¡Encaja! A lo que voy es a esto:
La época del año influye muchísimo en lo que verás en una inspección de colmena. Puedo decirte que esto será aquí y aquello será allá... pero, en realidad, conocer las estaciones de tu colmena es la guía que necesitas.
Los componentes son importantes, por supuesto; ¡pero saber qué deberías ver y cuándo deberías verlo es aún más importante!
Desglose estacional
Principios de primavera (finales de febrero – abril)
- La mayor parte de la miel almacenada se habrá consumido durante el invierno.
- Un poco de néctar y polen alrededor del nido de cría, probablemente generado por el apicultor mediante alimentación suplementaria.
- La población aumenta rápidamente, debería tener la forma y el tamaño del fútbol.
Finales de primavera/principios de verano (mayo – junio/julio)
- Se deben restablecer las reservas de miel en el nido de cría.
- Abundante néctar y polen alrededor del nido de cría para alimentar a la población en constante crecimiento.
- La población está llegando a su pico y debería tener el tamaño de una pelota de baloncesto.
Finales de verano/principios de otoño (agosto – septiembre)
- Las reservas de miel pueden verse estresadas debido a la escasez del verano.
- Recursos como el néctar y el polen están estresados y dependen del apicultor para complementar lo que la naturaleza no proporciona.
- El nido de cría activo se ha reducido al tamaño de un melón.
Finales de otoño/principios de invierno (octubre – noviembre)
- Los depósitos de miel se reconstruyen hasta alcanzar una capacidad suficiente para pasar el invierno de 30 a 40 libras (3 a 4 marcos) por caja de cría profunda, debido a la alimentación complementaria durante la escasez y, en algunos casos, a un flujo de néctar en otoño.
- Muy poco néctar y polen porque no está disponible y no es necesario, debido a la época del año y la reina no está poniendo.
- La cría es escasa. La población se encuentra en fase de latencia, sin crías nuevas, y se mantiene estable. Invierno (noviembre - mediados de enero).
- La colmena está agrupada y se alimenta de miel almacenada, cuya cantidad disminuirá día a día.
- No hay prole de la que hablar, dependiendo de su ubicación geográfica.
- La cría todavía se considera una etapa latente, pero en realidad está disminuyendo debido al envejecimiento de las abejas.
Identificar su punto de referencia le proporcionará la lista de verificación de lo que busca. Si no ve alguno de estos componentes principales en su inspección, ¡esa será la primera señal para que busque más a fondo!
Saber qué debes ver y cuándo es la mitad del camino recorrido. ¡Ahora estás listo para dar el siguiente paso!
El próximo mes profundizaremos en la identificación de los problemas que enfrentamos en cada temporada. Estar preparado y saber qué hacer cuando los veas es la otra mitad de la batalla, ¡y una batalla que ganarás!
Por: Chari Elam
Vídeo de inspección completa de la colmena por Blake Shook