Miel - Congelada en el tiempo... ¿O no?
Por: Nanette Davis - Maestra Apicultora
Director de mentores juveniles de la Asociación de apicultores del condado de Montgomery
Con el excepcional clima invernal y la posibilidad de nevar en casa, puede que te hayas preguntado qué le pasa a la miel a temperaturas gélidas. Después de revisar toda la información sobre técnicas para almacenar este valioso tesoro, te habrás preguntado: ¿acaso se congela?
Aceptamos 0 °C como punto de congelación porque es entonces cuando el agua pasa de líquido a sólido. Sin embargo, la miel es un líquido que alcanza un estado frágil/sólido comparable al del vidrio a temperaturas inferiores a -7 °C y un estado casi sólido con cierta fluidez a -2 °C.
Nuestros refrigeradores-congeladores suelen tener una temperatura predeterminada de 0 °F. Eso significa que, técnicamente, cuando metemos miel en el congelador, ¡no se congela! Dato curioso: La propiedad anticongelante de la miel llevó a los innovadores de principios del siglo XX a usar una mezcla de miel como líquido para radiadores. ¡Increíble!
Ahora que estamos seguros de que no crearemos un bloque de miel en nuestro congelador, exploremos algunas otras características importantes para los apicultores y consumidores, como la cristalización y la calidad.
La temperatura ideal para que la miel cristalice es de 57 °F. Cuanto más alejada esté de esta temperatura, ya sea más alta o más baja, más lenta será la formación de cristales.
La calidad y la frescura de la miel están determinadas internacionalmente por la actividad enzimática y los bajos niveles de hidroximetilfurfural (HMF).
Sabemos que las temperaturas más altas y el tiempo afectan negativamente a las enzimas y provocan la formación de HMF a partir de ciertos azúcares. Por el contrario, la miel congelada conserva las enzimas y se ha demostrado que genera menos HMF que la miel a temperatura ambiente. Si bien congelar la miel pura no formará un panal, sí ralentizará la formación de cristales y la degradación de este dulce con el tiempo. ¡Por eso, congelar es la mejor manera de preservar la calidad de la miel!